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¿Son tus primeras tarjetas de combustible?
Las tarjetas pueden ofrecerte descuentos al repostar, ayudarte a recuperar el IVA e impuestos intracomunitarios, así como darte seguridad, ya que no tendrás que llevar efectivo a estos efectos. Saber más
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Preguntas frecuentes
Las tarjetas de combustible tienen dos tarifas principales tanto para diesel como gasolina: Precio de poste o precio fijo semanal.
El precio de poste es el que ofrece la estación al público. Llenas el tanque y pagas al precio normal de la estación de servicio.
Algunas tarjetas ofrecen precios fijos semanales, permitiéndote repostar en ciertas estaciones con un descuento sobre el precio que marca la estación. Estos suelen ser céntimos pero con un gran ahorro a largo plazo.
El precio semanal es fijo para toda la semana, se establece uno nuevo semanalmente y se basa en el precio del proveedor esa semana.
La ventaja y también desventaja de repostar a precio de poste es que una semana puede subir el precio así como a la siguiente puede bajar.
Lo bueno de pagar un precio fijo es que puedes planificar lo que gastarás esa semana y administrar los gastos. La desventaja es que podrías pagar más que el valor del mercado en determinadas épocas del año.
Puedes comprar variedad de artículos relacionados con el vehículo. Además de gasolina y diésel, puedes comprar AdBlue, aceites y lubricantes. Esto es genial si se enciende la luz del indicador de aviso cuando los conductores están en una ruta lejos.
Dependiendo de la tarjeta también podrás pagar algunos otros servicios tales como peajes.
Algunas tarjetas están diseñadas para viajes a nivel Europeo y sus conductores puedan pagar peajes, automatizando los pagos cuando sus vehículos pasan por los sensores.
Por una tarifa de suscripción, algunos proveedores también ofrecen la recuperación de IVA Intracomunitario para todos los países.
El precio de las tarjetas dependerá de las que hayas seleccionado y cada una cobra importes ligeramente diferentes.
Esto significa que debes conocer las siguientes tarifas de suscripción:
- Comisión de cuenta
- Cargo anual por tarjeta
- Comisión por devolución de recibos
- Tarifa por no uso de la tarjeta
- Cambio de nombre de la empresa
- Comisión por retraso en el pago
- Remplazo de tarjeta (perdida, robo, dañada)
- Tarifa por facturas en papel
- Recargos por tarifas de peajes
Sin embargo, el coste más importante es el cargo anual por tarjeta, este oscila entre un máximo de 20€ y un mínimo sin costes.
Las tarjetas de combustible sólo se pueden usar para gastos de transporte, mientras que las tarjetas de crédito se pueden usar para pagar casi cualquier producto.
Si un empleado tiene una tarjeta de crédito de la empresa, puede comprar cualquier cosa. Esto puede resultar en que se dediquen muchas horas a revisar facturas de tarjetas de crédito para detectar transacciones de combustible.
Las tarjetas de combustible, por otro lado, están restringidas a la compra únicamente de combustible y productos de transporte y no se pueden usar para comprar otro tipo de artículos en la estación de servicio. Los proveedores de tarjetas de combustible le brindan una lista detallada cada vez que se utilizó la tarjeta, exactamente cuándo, dónde y qué se pagó con ella.
El resultado es que las tarjetas de combustible reducen la administración, además de reducir el riesgo de gastos no autorizados en combustible para vehículos personales, así como en artículos que no son combustible.
Los autónomos, PYMES y las grandes empresas líderes pueden obtener la aprobación para sus tarjetas de combustible, siempre que cumplan con los criterios requeridos para la aceptación.
Debe ser una empresa registrada o un autónomo, y debe tener declaraciones de renta o de IVA, aunque esto no es obligatorio para todas las tarjetas de combustible.
También debe pasar una verificación de crédito para poder obtener una tarjeta de combustible. Si bien las condiciones son menos estrictas que otros productos financieros (como préstamos), se deberá demostrar que puedes pagar las facturas.
Si no tienes una calificación crediticia lo suficientemente buena, hay algunos proveedores de tarjetas de combustible que aún pueden darte tarjetas de combustible con un acuerdo de prepago. La forma en que esto funciona es que pagas el combustible de la semana con anticipación, y tus conductores podrán repostar con ese fondo.
Las tarjetas de combustible son una buena idea si eres el propietario de un negocio y buscas formas de administrar los gastos de tu flota de manera más eficiente.
Ofrecen cinco beneficios clave.
1. Reduces las tareas administrativas.
Tu equipo de administración no necesitará contabilizar las compras a través de los recibos en papel porque las tarjetas de combustible mantienen un registro electrónico de sus transacciones relacionadas con el combustible, separando el IVA.
2. Simplifica la contabilidad
Las aplicaciones y los sitios web de los clientes de tarjetas de combustible producen facturas aprobadas por la Agencia Tributaria, lo que facilita el envío de gastos precisos y la recuperación del IVA de las compras de combustible.
3. Obtén descuentos en combustible
Muchas tarjetas de combustible te permiten comprar diesel y gasolina a precio más económico, lo que significa que tu empresa gasta menos al repostar.
4. Paga peajes fácilmente
Las tarjetas de combustible se pueden utilizar para pagar los peajes en Europa, lo que facilita el transporte de mercancías por autopistas.
5. Reducir el riesgo de fraude
Las transacciones con tarjetas de combustible son un método de pago seguro que se monitoriza, lo que ayuda a reducir las posibilidades de fraude con tarjetas o de perder dinero si tus conductores son víctimas de un robo.
Uno de los beneficios de las tarjetas de combustible es que simplifican el proceso para reclamar el IVA de gasolina, diesel y otros gastos de transporte.
Cada transacción que realizas con la tarjeta de combustible se registra electrónicamente. Esta información se utiliza para crear facturas aprobadas por hacienda con toda la información que necesitas para reclamar el IVA de las compras que hayas realizado
Una cosa importante a tener en cuenta es que se puede reclamar el IVA sobre el combustible comercial hasta tres años (dependiendo del país) después de la compra. Para ello, deberás tener los recibos como prueba.
Puedes obtener más información sobre cómo reclamar el IVA de su gasolina y diésel visitando la página web de gastos de transporte del gobierno del España.
Los proveedores de tarjetas de combustible te brindan acceso a una cuenta online para gestionar las tarjetas.
Este servicio en línea ofrece las facturas electrónicamente. Puedes ver las transacciones por tarjeta, vehículo o conductor, y solicitar tarjetas adicionales o cancelar tarjetas perdidas/robadas de manera sencilla.
Puedes configurar alertas para aumentar la seguridad de modo que sepas inmediatamente si se realiza por ejemplo una compra inusualmente grande en una tarjeta de combustible, o si una tarjeta se usa varias veces en un corto espacio de tiempo.
Puedes ver informes sobre el uso de la tarjeta, kilómetros por litro y otros datos, que pueden ayudarte a analizar y controlar mejor el gasto de combustible.
También puedes descargar tus facturas.
Existe una gran cantidad de opciones de tarjetas de combustible disponibles.
Estas incluyen tarjetas de las principales petroleras, que te permiten usar su red nacional para comprar combustible de alta calidad. Algunas tarjetas también ofrecen petroleras o marcas más pequeñas.
Puede ser complicado saber qué tarjeta seleccionar, ya que muchas de ellas ofrecen características y beneficios muy similares (en particular, las de la misma marca).
Es importante encontrar una tarjeta de combustible que tenga las características específicas que tu negocio necesita, desde los tipos de combustible ofrecidos hasta la cobertura disponible.
Puedes averiguar qué opciones de tarjetas de combustible están disponibles para tu empresa utilizando la herramienta de comparación de iCompario. Simplemente introduzca los datos solicitados y te mostrará todas las tarjetas disponibles adaptadas a tus necesidades.
Usar una tarjeta de combustible es tan simple como usar una tarjeta de crédito. Todo lo que tienes que hacer es repostar, elegir cualquier producto adicional que necesites (como aceite o Adblue) y luego presentarla en caja.
Al igual que con una tarjeta de crédito, el dinero que ha gastado no se carga inmediatamente en la cuenta bancaria de tu empresa. Se te envía una única factura que cubre todas las compras realizadas durante un período específico (ya sea una semana o un mes). Luego, tu empresa liquida esta factura con el proveedor de la tarjeta de combustible.
Para la mayoría de las empresas, la facturas son semanales. Los proveedores a veces te ofrecen un calendario de pagos basado en el rating crediticio de tu empresa. Para realizar el pago, la mayoría de las empresas lo realizan a través de domiciliación bancaria. Para verificar la factura o rastrear el importe a medida que se acumula durante la semana, muchos proveedores de tarjetas ofrecen un sistema de administración de cuentas online.
Las tarjetas de combustible tienen algunas características clave y ofrecen beneficios útiles para los usuarios. Estas características incluyen plataforma online para la gestión de la cuenta, precios semanales fijos de combustible y un mapa para localizar las estaciones.
Los beneficios clave incluyen reducir la cantidad de tiempo que dedicas a la administración y tener la opción de comprar combustible, Adblue y pago de peajes ahora y pagarlos más adelante. También recibirás facturas con la información que necesitas para que sea más fácil reclamar la devolución del IVA intracomunitario.
Sin embargo, estas características y beneficios solo incluyen a empresas de transporte con conductores profesionales y no para particulares que conducen sus vehículos por placer.
Si tienes un negocio con flota, es muy probable que puedas obtener una tarjeta de combustible. Pero si solo usas tu vehículo para viajes personales, no podrás obtener una tarjeta de combustible